Dilluns, 8 de setembre de 2014
Noticias generales
Inspección detecta un enorme volumen de contratos irregulares en turismo
Diario de Mallorca, 8 de septiembre de 2014
Los controles en hostelería y restauración obligar a transformar numerosos contratos eventuales en indefinidos. Los sindicatos critican que las empresas vulneran el convenio recién firmado
08.09.2014 | 06:30
Este verano se ha aplicado una vigilancia especial en los contratos del sector turístico. B. Ramon
F. Guijarro El verano de mayor rentabilidad empresarial parece haberse convertido también en el de mayor precariedad en la contratación, con numerosos fraudes detectados en esta materia gracias a los controles realizados por la Inspección de Trabajo, según destacan fuentes del ministerio de Empleo. Desde este departamento se subraya que durante la campaña de vigilancia que se ha llevado a cabo durante las últimas semanas se ha obligado a transformar muchos contratos eventuales en otros de carácter indefinido (ya sean fijos o fijos-discontinuos), al tiempo que se han descubierto casos en el que se hacía cotizar al trabajador solo 10 horas semanales cuando en realidad podía estar haciendo incluso más de 40. La proliferación de estas situaciones ha llevado a los sindicatos a criticar a un colectivo empresarial que está vulnerando un convenio colectivo cuando hace unos pocos meses que se pactó.
Según el secretario general de la federación de CCOO encargada del sector de la hostelería, Ginés Díez, este verano ha supuesto un récord en este tipo de incumplimientos, tanto en lo que se refiere a la contratación por menos horas de las que realmente se realizan o por el exceso en la ejecución de horas extraordinarias, y por el no disfrute de los días de descanso fijados. Y ello, según se lamenta, precisamente cuando se acaba de renovar el convenio que regula la actividad en estos sectores. Estos máximos se producen especialmente en lo que respecta al exceso de horas extras o a la renuncia de algún día de libranza, las tradicionales vulneraciones.
Fuentes del ministerio de Empleo confirman que este verano se ha desarrollado una campaña especial de controles en materia de contratación en el sector turístico, y que el resultado ha sido el descubrimiento de un número muy elevado de contratos eventuales en fraude en el caso de las empresas hoteleras, que se han tenido que transformar en fijos o fijos discontinuos para así evitar la sanción. En el caso de la restauración, la práctica que se ha detectado con mayor asiduidad es la de firmar contratos a tiempo parcial por menos horas de las que realmente se realizan. En concreto, se han descubierto casos en los que se hacía cotizar al trabajador solo diez horas semanales, cuando en realidad estaba haciendo entre cuatro y ocho diarias.
En este sentido, desde UGT se pone de relieve que el nivel de incumplimiento de la normativa es más elevado en el sector de la restauración que en el de la hostelería, y que son las grandes cadenas las que muestran un mayor respeto por los acuerdos suscritos con los sindicatos.
Fuentes de la Inspección de Trabajo no ocultan su preocupación ante el fraude vinculado a la contratación a tiempo parcial, ya que supone hacer cotizar al asalariado menos horas de las que realmente desarrolla, lo que implica no solo convertirle en un "pobre" pese a contar con un empleo, sino que también va a provocar que en el futuro perciba unas pensiones por jubilación mínimas, lo que implica una vejez en una situación económica muy precaria.
En este sentido, se lamenta que la reforma laboral facilitará la contratación a tiempo parcial y dificultará los controles, pese a que este último aspecto se ha corregido recientemente, ya que ha implantado en los empresarios la idea de potenciar la contratación precaria.
Fuentes del citado departamento estatal reconocen que también son comunes los fraudes relacionados con el exceso de horas extras y con la renuncia a días de libranza a cambio de la correspondiente contraprestación económica, pero no se oculta que la vigilancia en estas materia es algo más laxa dado que en muchas ocasiones son los trabajadores los primeros interesados en sumar el máximo tiempo de trabajo para así cerrar la temporada turística con el mayor volumen de ingresos posibles, debido a que muchos de ellos se ven abocados al desempleo durante el invierno.
Este verano se ha aplicado una vigilancia especial en los contratos del sector turístico. B. Ramon
F. Guijarro El verano de mayor rentabilidad empresarial parece haberse convertido también en el de mayor precariedad en la contratación, con numerosos fraudes detectados en esta materia gracias a los controles realizados por la Inspección de Trabajo, según destacan fuentes del ministerio de Empleo. Desde este departamento se subraya que durante la campaña de vigilancia que se ha llevado a cabo durante las últimas semanas se ha obligado a transformar muchos contratos eventuales en otros de carácter indefinido (ya sean fijos o fijos-discontinuos), al tiempo que se han descubierto casos en el que se hacía cotizar al trabajador solo 10 horas semanales cuando en realidad podía estar haciendo incluso más de 40. La proliferación de estas situaciones ha llevado a los sindicatos a criticar a un colectivo empresarial que está vulnerando un convenio colectivo cuando hace unos pocos meses que se pactó.
Según el secretario general de la federación de CCOO encargada del sector de la hostelería, Ginés Díez, este verano ha supuesto un récord en este tipo de incumplimientos, tanto en lo que se refiere a la contratación por menos horas de las que realmente se realizan o por el exceso en la ejecución de horas extraordinarias, y por el no disfrute de los días de descanso fijados. Y ello, según se lamenta, precisamente cuando se acaba de renovar el convenio que regula la actividad en estos sectores. Estos máximos se producen especialmente en lo que respecta al exceso de horas extras o a la renuncia de algún día de libranza, las tradicionales vulneraciones.
Fuentes del ministerio de Empleo confirman que este verano se ha desarrollado una campaña especial de controles en materia de contratación en el sector turístico, y que el resultado ha sido el descubrimiento de un número muy elevado de contratos eventuales en fraude en el caso de las empresas hoteleras, que se han tenido que transformar en fijos o fijos discontinuos para así evitar la sanción. En el caso de la restauración, la práctica que se ha detectado con mayor asiduidad es la de firmar contratos a tiempo parcial por menos horas de las que realmente se realizan. En concreto, se han descubierto casos en los que se hacía cotizar al trabajador solo diez horas semanales, cuando en realidad estaba haciendo entre cuatro y ocho diarias.
En este sentido, desde UGT se pone de relieve que el nivel de incumplimiento de la normativa es más elevado en el sector de la restauración que en el de la hostelería, y que son las grandes cadenas las que muestran un mayor respeto por los acuerdos suscritos con los sindicatos.
Fuentes de la Inspección de Trabajo no ocultan su preocupación ante el fraude vinculado a la contratación a tiempo parcial, ya que supone hacer cotizar al asalariado menos horas de las que realmente desarrolla, lo que implica no solo convertirle en un "pobre" pese a contar con un empleo, sino que también va a provocar que en el futuro perciba unas pensiones por jubilación mínimas, lo que implica una vejez en una situación económica muy precaria.
En este sentido, se lamenta que la reforma laboral facilitará la contratación a tiempo parcial y dificultará los controles, pese a que este último aspecto se ha corregido recientemente, ya que ha implantado en los empresarios la idea de potenciar la contratación precaria.
Fuentes del citado departamento estatal reconocen que también son comunes los fraudes relacionados con el exceso de horas extras y con la renuncia a días de libranza a cambio de la correspondiente contraprestación económica, pero no se oculta que la vigilancia en estas materia es algo más laxa dado que en muchas ocasiones son los trabajadores los primeros interesados en sumar el máximo tiempo de trabajo para así cerrar la temporada turística con el mayor volumen de ingresos posibles, debido a que muchos de ellos se ven abocados al desempleo durante el invierno.
